Descripción general |
El desarrollo de las sociedades del mundo y de la convivencia humana a través del tiempo, hasta el actual período histórico de modernidad tardía, sirve de telón de fondo para comprender el papel clave que juega la convivencia y la mediación y resolución de conflictos en las instituciones educativas. Se trata de situar la convivencia en su justo marco de aproximación conceptual y elaboración práctica y activa, pues dito marco es más amplio, complejo y dinámico de lo que a menudo parece: trasciende la cultura escolar y las distintas instituciones educativas en general, englobando otros ámbitos formales y no-formales de acción y producción sociocultural, como son la educación en familia, la cultura popular de la comunidad local, los medios de comunicación de masas, y las diversos ámbitos institucionales del Estado.
Las instituciones educativas están insertadas en este gran marco socio-político y cultural, uno que, a su vez, se encuentra inmerso en otro contexto aún más amplio de política internacional y trasnacional que se mueve al ritmo de un sistema económico cada vez más globalizado: el capitalismo neoliberal. En este escenario mundial de ámbitos tan interdependentes y complejos —y de recursos naturales finitos—, la conflictividad surge desde los desequilibrios de poder entre colectivos e individuos con intereses divergentes, desequilibrios reflejados en los propios sistemas educativos. Mas no son los conflictos, per se, lo que amenaza el bienestar, pues los conflictos son un aspecto natural de las relaciones humanas. La violencia surge de las formas en que dichos conflictos sean abordados. Si son intervenidos de manera pacífica, pueden incluso resultar creativos y productivos a la hora de procurar desde las comunidades educativas e locales una convivencia cosmopolita que respete la diferencia produto de la diversidad de experiencias y procedencias, de creencias, ideologías e identidades, de orientaciones persoales y de las prácticas culturales de las personas integrantes de las comunidades locales.
El alumnado de esta materia aprenderá a afrontar con creatividad este escenario a través de la cultura de la paz y la nonviolencia para así fomentar, desde la dirección de los centros educativos, una convivencia óptima tanto en los ámbitos institucionales participados, como, por extensión, en las comunidades multiculturales que los rodean. |