Descrición xeral |
El estudio de las industrias culturales pretende mostrar a los estudiantes que la cultura tiene también una importante dimensión económica, empresarial y tecnológica.
Dentro de las industrias culturales se suele incluir la televisión, la radio, el cine, los diarios y revistas, los libros, la música, los contenidos de Internet, los videojuegos y la publicidad. Todas estas son actividades cuyo principal objetivo es comunicarse con una audiencia, crear textos.
David Hesmondhalgh (profesor en la Universidad de Leeds) sostiene que todos los productos y servicios de estas industrias son textos en el amplísimo sentido de que están abiertos a la interpretación; en ellos es mucho más relevante el significado (lo que comunican) que la utilidad (el servir para).
Estos textos son producidos y comercializados industrialmente, para que puedan llegar al mayor número posible de consumidores. Y los grupos empresariales que trabajan en estos sectores siempre han competido entre ellos para conseguir el tiempo y el dinero de sus audiencias, los ingresos publicitarios y los mejores profesionales, tanto creativos como técnicos.
Además, desde finales del siglo XX las tecnologías de base digital han propiciado un revolucionario proceso de convergencia en estas industrias, y han diluido sus tradicionales diferencias como soportes de textos. Por ejemplo, un diario on-line ¿no es ahora un medio audiovisual?
Los cambios que estamos viviendo, y los que llegaremos a ver, han transformado la manera cómo los humanos nos comunicamos a través de los medios, así como la función y organización de estas instituciones en la sociedad.
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