Examen de junio: Solo
podrán presentarse los alumnos que asistan regularmente a clase y entreguen la
mayoría de los trabajos y ejercicios propuestos en tiempo y forma. Calificación
sobre 90 puntos, más la calificación del curso de hasta 10 puntos.
Examen de julio: La prueba es libre, por lo que podrán
presentarse todos los alumnos matriculados. Calificación sobre 100 puntos. A los
alumnos no aptos en junio se les aplicará el criterio de calificación, de junio
o julio, más favorable.
Aptitud en la
materia: Serán aptos los alumnos que obtengan una calificación mínima de 50
puntos.
Trabajos tutelados:
Se recogerán y puntuarán las prácticas realizadas, en grupo e individualmente,
así como los ejercicios de refuerzo propuestos. Podrán convalidarse
parcialmente o en su totalidad, por otros trabajos o ejercicios realizados por
el alumno, a criterio del profesor.
Falta de asistencia: Los alumnos, que por motivos laborales, de
salud o familiares, no puedan asistir regularmente a clase, deberán
justificarlo debidamente, a fin de permitir su evaluación en junio.